Un "lo siento" demasiado tarde [+13]

por **Belle-chwan** Sáb Oct 06, 2012 1:53 am

¡Holi! Pss aquí os dejo mi anterior trabajo, para la gente que estuviera interesada en mi one-shot del concurso x33. Eso sí nada de copiar mi trabajo, sino golpe de remo (?¿) Nah, en serio no copien trabajos que no son suyos, piensen en los sentimientos del autor T-T

Un "lo siento" demasiado tarde

-Pues si tan molesto estás, déjame en paz- gritaba una chica de cabellos azabaches cortos, para luego salir de la casa y subir al coche. Dejando con la palabra en la boca al chico pelirrojo que salía detrás de ella, viendo cómo se iba con el coche a saber dónde.

-¡Sí! ¡Vete! ¡Siempre haces lo mismo Aki!- Gritaba furioso el muchacho al coche, aunque sabía que ya no le oiría la chica llamada Aki.
Miró el cielo furioso al darse cuenta que, encima de la discusión con su amada, empezaba a llover. Se giró aún molesto y entró a la casa.

La chica miraba por el retrovisor cómo, el chico furioso, entraba a su casa hecho una furia. Giró a la derecha y se encontró con la carretera y el campo en su entorno.

Estaba enfadada con Tayû, su novio, por ser un celoso, es que nunca confiaría en ella. Siempre acababan enfadados de la misma forma por el carácter celoso del chico. Empezó a llorar de rabia sin querer, ya que, aunque era un celoso, lo quería como a ninguna otra persona.

Aún recordaba la primera vez que lo vio: llovía, como ahora, pero la situación entre ellos era muy distinta a la actual, sobretodo porque en aquel entonces, Tayû la salvó de unos criminales que solo querían aprovecharse de que estuviera sola. Siempre había sido así con ella, tan amable y protector, como un héroe. También estuvo cuándo sus padres murieron en el accidente aéreo y él le velo todas las noches hasta que dormía tranquila sobre su pecho. Luego empezaron a salir y durante cuatro años más, seguían igual y hasta habían pensado en casarse. Se casarían dentro de ocho meses.

Sin embargo empezaron los celos, ya que ella había salido con sus amigas y, en un arrebato de ellas, la habían juntado con otro chico. Sin embargo, aunque era una broma inocente de sus amigas, a Tayû eso le había sentado mal. Y de ahí venía la discusión, se habían pasado toda la tarde discutiendo, hasta que ella, en un arrebato, decidió irse con el coche a dar un paseo.

Aki miraba por todos lados, sin saber dónde y qué dirección tomar. Coger el coche porque sí había sido muy estúpido por su parte. Además que por las lágrimas le costaba ver peor, quitándoselas bruscamente con la manga para poder seguir viendo, pero éstas no paraban de recordarle lo tonta que era al dejar al chico con la palabra en la boca.

Sí. Sería mejor dar la vuelta y hablar tranquilamente con él o, al menos, intentarlo.

De repente se oyó un estruendo en la carretera y el camión que tenía delante hizo tijeras y cortó el paso, chocándose con todos los coches que tenía detrás, empezando por ella, que intentó parar, pero le sirvió en vano.

...

Tayû miraba caminaba de un lado para otro sin apartar la vista de la puerta. Esa forma de irse de Aki lo había enfurecido, pero sabía muy bien el por qué lo había hecho. Aki siempre había odiado discutir porque cuando sus padres murieron, recordaba que se había pasado noches disculpándose mentalmente con sus padres por haber discutido con ellos antes de irse. Eso lo entristeció y miró con tristeza la puerta por la que había salido con novia, su compañera, su amiga.

Salió a la calle. Aún llovía, haciendo que su preocupación creciera. Y se dirigió al garaje, sacando la vieja moto de su padre. Sabía que funcionaba, pero no le gustaba mucho usarla, ya que muchas veces la moto te podía dejar tirado en cualquier lado. Subió a la moto e hizo lo mismo que había hecho Aki con el coche, encontrándose con la carretera. La conocía demasiado y sabía que se daría unas cuantas vueltas con el coche y luego volvería disculpándose y llorando.

Todo en la carretera era lo normal, hasta que se dio cuenta que estaban parando a todos los coches, haciendo que él también parara. Parece que había un accidente. De repente le entró un mal presentimiento, haciéndole temblar. Intentó seguir por los pequeños caminos que dejaban los coches para poder llegar al causante del accidente, pero como sabía, la moto se paró dejándolo tirado. Tiró la moto y el casco y salió corriendo hacia delante, chocándose con algunos curiosos como él que habían salido de sus coches. Sin darse cuenta, llegó corriendo al accidente, viendo el enorme camión tirado y partido en medio de la carretera, dónde había numerosos coches chocados con él.

Fijó su vista en los coches y en las personas heridas, que los bomberos y médicos intentaban sacar con cuidado y salvarles. Pero su vista se quedó clavada en una cabellera negra, corta. Estaba encerrada en medio de todo ese caos de coches y no la podían sacar, él la podía ver por lo cristales rotos.

Ese pelo... Sus ojos se abrieron con sorpresa. No. No podía ser verdad. Ella no. Saltó la cinta de policía y se acercó corriendo a los coches destrozados. Muchos policías y bomberos intentaron pararlo. No lo consiguieron.
Al fin llegó a su destino: la puerta que intentaban abrir. Él sin pensárselo dos veces, empezó a golpear la puerta haciéndose sangre: no se abría. Lo intentó con sus piernas: nada. Le cogió a un bombero lo que parecía una especie de hacha y empezó a golpear la puerta, hasta que al fin cedió.

Tayû quitó la puerta con prisa y lo que vio le dejó paralizado: el erbax había funcionado parando el cuerpo de la chica, estaba lleno de sangre de ésta; a la chica le corría la sangre por la boca y nariz; su pelo azabache enrojecido por la sangre y revuelto por el impacto; y lo que más le dejó con miedo, un gran cristal atravesaba el hombro izquierdo de la chica: no paraba de sangra y había dañado el corazón.

Tayû se arrodillo ante ella, llorando. La balanceó despacio, como si temiera hacerle más daño.

-Aki. Aki, despierta, por favor- susurraba él con miedo. Pero extrañamente, la chica abrió los ojos. Se le notaba el dolor de éstos.

-Tayû...- dijo con dificultad y el chico se acerco más a ella. De repente empezó a llorar -lo lamento. Lo lamento tanto... Yo no quería hablarte así... Fue culpa mía- lloraba la chica, viendo como el chico lloraba.

-No digas eso. Ha sido culpa mía. No debería ser tan celoso- lloró él acariciando el pelo azabache.

-Tayû... Si no salgo de ésta...

-No... No digas eso. Saldrás de ésta, te lo prometo- le cortó el chico, intentando abrazarla. La chica le sonrió divertida, mientras lloraba.

-No deberías prometer algo que no cumplirás... Sabes que no me gusta que me hagan eso- dijo acariciando la cara del chico, haciendo que su sangre quedará en su cara, para luego seguir. -Escucha... Si no salgo de ésta... Prométeme que serás feliz. Me da igual con quien. Pero que seas feliz- sonrió la chica, viendo como el chico se acercaba a ella y le daba un tierno beso en los labios.

-Sabes que sin ti... Nunca podré ser feliz. Te amo- le dijo llorando el chico sin parar de besarla.

Sin embargo, Aki empezó a cerrar los ojos. Se sentía pesada y cansada. Necesitaba dormir.

-Yo... también... te am...- dijo cerrando al fin los ojos y descansar.

-¿Aki? Aki, por favor, no juegues a esto. Aki- llamó innumerables veces, ella no despertaba. Empezó a gritar -¡Aki! ¡No! ¡No me dejes solo! ¡Por favor! ¡Akiii!

Gritó a la chica, que ya se hallaba muy lejos de aquel lugar.

Seguramente en uno mejor que el actual, pero siempre estará velando los sueños y vida de aquel muchacho que amó y amará por siempre.

FIN

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Hasta aquí, por cierto si ven este Fic en otro lugar (aparte de en Fanfic.es y en FictionPress, que lo he subido allí x3) que no fuera aquí me avisan para saber si lo he subido yo o no (ya me pasó una vez -.-)

Mi propia poblicidad: si están más inetresados en mis historias (??), mi nombre en Fanfic.es y Fanfiction.net es natsumi19 Wink

Bye!! x33