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El muelle de la regresión [Longfic]
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El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Lun Jul 04, 2011 11:58 am
Sólo dos cosas: Estaba fakin aburrida y hace tiempo que no me paseo por estos lados so, me dieron ganas de publicar fic LOL
A versh, descripción, corta descripción *thinks about it* es una de esas historias dramáticas, empalagosas, telenovelescas(?) que me gustan a mí CHAN. Well, no al extremo I guess, pero ¿dramatismo? UH Yeah, eso es lo mío![El muelle de la regresión [Longfic] 427950](/users/2614/38/02/60/smiles/427950.gif)
Ojalá les guste, les intrigue, no mueran de aburrimiento(?) y... trataré de no demorarme en el proceso creativo, porque en tres días más soy libre de la escuela xD
YI-PI~
A versh, descripción, corta descripción *thinks about it* es una de esas historias dramáticas, empalagosas, telenovelescas(?) que me gustan a mí CHAN. Well, no al extremo I guess, pero ¿dramatismo? UH Yeah, eso es lo mío
Ojalá les guste, les intrigue, no mueran de aburrimiento(?) y... trataré de no demorarme en el proceso creativo, porque en tres días más soy libre de la escuela xD
YI-PI~
- Prólogo:
- “Dime por favor por qué camino,
Podré yo caminar, sin ser tu huella;
Dónde podré correr no por buscarte,
Y dónde descansar de mi tristeza.
Dime por favor cuál es la noche,
Que no tiene el color de tu mirada;
Cuál es el sol, que tiene luz tan solo,
Y no la sensación de que me llamas.
Dime por favor donde hay un mar,
Que no susurre a mis oídos tus palabras”
(Fragmento de “Poema de un recuerdo”, Gustavo Alejandro Castiñeiras)
•••
Te odio, no sabes cuánto. Irónico, ¿cierto? Irónico como los sentimientos que se tienen hacia alguien pueden dar un vuelco tan grande por un hecho. Un hecho desconsiderado, un hecho egoísta, indiferente.
Te odio, no sabes cuánto te odio. Y más me odio a mí mismo por no saber controlar lo que empezaba a sentir por ti. Pero no creí que fuera la gran cosa, pues solo soy un niño, uno muy ingenuo.“Es algo pasajero, ya va a pasar”
Eso era lo que solían decirme para consolarme. Ojalá así fuera… Tal vez no estaría ahora muerto en vida, encerrado en mi cuarto, aferrándome a esta maldita caja de recuerdos que llevan tu nombre, con lágrimas en los ojos. A veces pienso que soy demasiado joven como para estar sufriendo por algo así. Tengo tan solo doce años y aún un largo camino que recorrer, sin mencionar que hace cinco años comencé a relacionarme contigo.“… Sasuke… tú me… gustas… Me gustas mucho…”
Me arrepiento de haber pronunciado tales palabras. ¿Por qué simplemente no me callé?, quizás todo sería diferente ahora, seguiríamos siendo amigos por lo menos, pero aún así tuve la esperanza de que me correspondieras. Y ¿qué fue lo que obtuve a cambio?, nada más que un “Lo siento” estampado con tinta sobre un trozo de papel. Dios, soy tan tonto… Soy tan tonto por ir a buscarte al muelle ese día… Pero estaba ilusionado, cegado.
- Como quiero olvidarte, Sasuke… - hablo y mi voz se quiebra. Conforme el maldito llanto empapa mi rostro lo único que hago es abrazar esa caja llena de objetos que me recuerdan a ti, que me hacen pensar en ti cada segundo que transcurre. En serio quiero olvidarte… pero no tengo la fuerza de voluntad suficiente como para dejarte ir.“Te odio, te odio, te odio”
Me lo repito mil veces mentalmente para apaciguar este dolor que siento. Y es cierto, te odio, en serio que te odio… porque te amo más que a cualquier otra cosa.
Seis meses viviendo esta situación no es sano. Debo olvidarte, aunque sé que tal vez jamás podré hacerlo, estoy decidido. Ya no puedo más con esto…
Desorientado por aquel desabrido llanto, me dirijo a lograr mi objetivo. Camino hacia mi armario en busca de la escalerilla para subir al ático y dejarlo todo atrás. Eso quiero, eso necesito. Subo cuidadosamente cada peldaño hasta alcanzar el techo. Desgraciadamente no puedo evitar dedicarle una última mirada a la caja, es entonces cuando comienzo a recordarte otra vez y me arrepiento.
- No puedo… no puedo hacerlo… - balbuceo. Dije que jamás podría olvidarte, ¿o no? Decepcionado por mi debilidad comienzo a descender. Desciendo, desciendo, tropiezo…
Y entonces pierdo el conocimiento.“Jamás podría olvidarte…”
& then...
- Capítulo 1: Reencuentro:
- Caminaba hacia allí una vez más. Mis pies se movían por inercia, no tenía idea del por qué. Pensaba que era simple pereza, o quizás no quería detenerme. Sí, era eso, estaba convencido.
La luz intermitente de los faroles iluminaba mi rostro entumecido cada cinco segundos, haciendo notar mi presencia casi fantasmal en aquel plano deshabitado.
Seguía caminando… Quería pasear mi mirada por el lugar, completamente curioso, pero no podía. Mi mente me obligaba a mantener la vista directa hacia ese punto en específico difuso por la bruma marina.
Paso a paso el paisaje se hacía más claro. Inexplicablemente me emocioné en demasía. Experimenté el embriagante olor de los eucaliptus traspasar mis fosas nasales. Inspiré profundo… quería llenar mis pulmones de aquella esencia. Divisé la bajada al bosque y mi corazón palpitó con fuerza desmesurada. Sentía la necesidad de seguir avanzando, mas me detuve. Comenzaba a dudar, comenzaba a sentir miedo, aún sin saber el por qué de todas las sensaciones que estaba palpando. Me quedé estático mirando el oscuro entorno hasta que mis ojos se acostumbraron a él. Un escalofrío recorrió mi cuerpo entero al percibir el viento frío acariciar mi rostro.
Suspiré… De pronto mis pies decidieron continuar con su camino. Por sí solos se deslizaron sobre aquellos improvisados peldaños de madera, uno por uno… hasta que finalmente aprecié la tierra húmeda bajo la suela de mis zapatos. Con cuidado seguí avanzando… La luna era la única encargada de propinarme resplandor. Aunque este fuera mínimo, de algo ayudaba. Me afirmaba del tronco de los árboles para evitar perder el equilibrio mientras descendía por aquella pronunciada cuesta.
En tan sólo segundos pude escuchar claramente el sonido de las olas chocar contra la orilla conforme me aproximaba a mi destino. Fue entonces cuando por fin visualicé el mar. Sentí la más grande de las desesperaciones. Increíblemente ansioso busqué con la mirada por algo en particular, algo que no tenía la más remota idea que era. Rápidamente mi búsqueda terminó. Localicé un muelle, un viejo muelle descansando a pocos metros por sobre el agua casi calma. Pero mi atención no estaba dirigida hacia aquel objeto inerte, si no hacia lo otro que distinguieron mis ojos. Una extraña silueta sentada a la orilla del muelle. No sabía de quien se trataba, pero creí conocerle, de hecho, un sentimiento de extrema felicidad me embargó por entero al verle, tanto que pensé que mi corazón estallaría debido a tales exageradas pulsaciones.
Tímidamente me acerqué para averiguar de quien se trataba. El chillido de la madera produjo que el individuo se percatase de mi presencia. Cuando por fin decidió voltearse…
Naruto…
Naruto…
- ¡Naruto!
- ¡¿Qué, qué?!, ¡¿qué ocurre’ttebayo?! – pegué un salto al oír mi nombre.
- Te quedaste dormido, de nuevo…
Ese maldito tono de reproche… Perezosamente me refregué los ojos y vi a Gaara apoyado en el marco de la puerta de mi habitación.
- No… No es posible’ttebayo, ¡puse tres alarmas! – exclamé incrédulo.
- Pues, como siempre, las lanzaste hacia el otro extremo del cuarto.
- ¿Qué hora es? – pregunté con la esperanza de que no fuera demasiado tarde.
- Las diez de la mañana.
Me quedé pasmado. Si no actuaba rápido, en unos cuantos minutos estaría más que muerto…
- Diablos, diablos, diablos, ¡diablos! – Me quité las sábanas ágilmente y corrí hacia mi armario - ¡Sakura va a matarme’ttebayo! – revolví la ropa y cogí un par de prendas al azar para, posteriormente, lanzarme al cuarto de baño con el fin de cumplir con ciertas normas de higiene a la velocidad de la luz. En cuanto salí de allí, ya aseado y medio vestido, escuché el teléfono sonar. Instantáneamente me invadió el miedo al ver que Gaara subía las escaleras con el susodicho objeto en mano. Una vez que ya se encontraba nuevamente frente a mí, tragué en seco al observarlo hacerme un ademán de “estás muerto” para luego entregármelo. Suspiré con pesadez…
- ¿D-Diga? – me atreví a contestar.
- ¡Naruto baka!, ¡¿sabes la hora que es?!
- ¡Lo siento, Sakura-chan!
- ¿Cuál es tu excusa esta vez?
- … Yo… me quedé dormido… - reí nervioso a la vez que me sobaba la nuca – Pero, pero ¡no te preocupes!, ¡volaré hacia la facultad si es necesario!
- Más te vale… Y no olvides traer tu trabajo de álgebra.
- Claro, el trabajo. El… trabajo…
- Lo hiciste, ¿cierto?
- ¡P-Por supuesto que lo hice! – mentí descaradamente.
- De acuerdo. Te veré en el receso entonces, si es que alcanzas a llegar.
- Ah-ha… - y colgó. Bufé hartado, esta situación hace días que se venía repitiendo. Me llevé las manos al rostro debido al sofoco que me causaba. Tanteé un poco mis sienes de manera casi violenta. Luego, deslizando la yema de mis dedos por la porción de cabello que tenía a mi alcance, finalicé mi fallida búsqueda por un mísero momento de calma.
- ¿Problemas? – escuché a Gaara preguntar. Como si no fuera lo suficientemente obvio para cuestionarse.
- No. Digo, sí. Bueno… No importa mucho’ttebayo – preferí bajarle el perfil al asunto. Decirle sólo me ocasionaría más problemas.
- ¿Seguro?
- Sí. Ya debo irme – quise excusarme rápido antes de que continuara el interrogatorio.
- Mejor deberías quedarte en casa a descansar. Dormir un poco más te ayudaría a relajarte, a recomponerte…
- No insistas, Gaara. Te dije que estoy bien, ¡en serio!, ¿ves? – esbocé un sonrisa tratando de parecer lo más convincente posible. Y, como esperaba, Gaara terminó cediendo ante mi obstinada postura.
- De acuerdo. Que te vaya bien.
- Gracias. ¡Te veo en la tarde’ttebayo! – Sacudí mi mano a modo de despedida.
Corrí escaleras abajo para finalmente salir de la casa. Ir a la facultad no era algo que me entusiasmara mucho. No soy de las personas más estudiosas que existen, de hecho, no soy para nada estudioso, sino todo lo contrario. Pero accedí a inscribirme para complacer a mis padres, quería verlos felices de nuevo. Después del trago amargo que les hice pasar hace ocho años era lo menos que podía hacer, ¿no? Aunque últimamente no me ha estado yendo muy bien. Hace días que me siento extraño… como desmotivado, nostálgico, triste sin razón aparente. Pensarán que estoy loco por haber rechazado la propuesta de Gaara, pues dormir es uno de mis pasatiempos favoritos, o mejor dicho, era uno de mis pasatiempos favoritos, porque, pensándolo bien, creo que esa es la razón de mi actual comportamiento.
Todo es culpa de esos sueños. Siempre los tengo, siempre las mismas imágenes aparecen en mi cabeza como si fueran un vago recuerdo de algo. No sé por qué les tomo tanta importancia siendo que los recuerdos ya se han vuelto algo tan banal para mí. Viví años sin recordar nada, sin saber siquiera quien era, ni reconocer a la gente que tenía cerca. Muchas de las memorias que tengo hoy en día no las recordé por mí mismo, por eso me desconcierta tanto… ¿Acaso es algo que no había recordado? ¿Por qué tengo la sensación de que he estado en aquel lugar antes? Es eso lo que me inquieta, además de que nunca dejo de pensar en ello.
Nuevamente me siento ofuscado y repito las acciones que realizaba hace un rato tras la llamada de Sakura. Cierro los ojos, tanteo mis sienes… De pronto escucho el insistente sonido de bocinazos a mí alrededor. Abrí lentamente los ojos ya sabiendo con lo que iba a encontrarme… Diablos, estaba tan inmerso en lo que pensaba que ¡me detuve justo en medio de la calle! Menos mal que era un paso peatonal, o si no ahora mismo estaría estampado en el pavimento.
- ¡Muévete niño estúpido! – escuchaba a los conductores maldecirme. Pero extrañamente no podía reaccionar.
De forma imprevista sentí como alguien jalaba mi brazo y me conducía hacia la otra acera. Lo miré de reojo y comprobé de quien se trataba.
- ¿Todo bien, Naruto-kun? – preguntó Sai con esa sonrisa despreocupada que lo caracteriza tanto.
- S-Sí, me distraje un poco, eso es todo… - eludí el agarre - Pero tú ¿no deberías estar en clases’ttebayo?
- De hecho hoy entro más tarde, ¿no deberías estar tú en clases?
- No más reproches, por favor. Con Sakura ya tengo suficiente.
- Entonces andando, Naruto-kun. Si es que no quieres que te den una golpiza.
- No me lo recuerdes’ttebayo.
Ambos comenzamos a avanzar de manera acelerada para poder llegar a tiempo. Qué suerte tenía de que la facultad no me quedara tan lejos, pues prontamente divisé el establecimiento y me sentí aliviado. Ya casi en la entrada divisé a Sakura sentada en una banca esperándome, entonces caminé más deprisa hasta que sus ojos se posaron en mí.
- Al fin llegas, Naruto. ¡Hola Sai! – aprovechó de saludar a mi acompañante.
- Lo siento, Sakura-chan – volví a disculparme.
- Naruto-kun está un poco triste, Sakura-san – comentó el desgraciado de Sai.
- ¿Triste?
- Tsk, ¡cállate Sai! ¡Eso no es verdad’ttebayo!
- Sí, estaba tan triste que decidió detenerse en medio de la calle para que los autos le pasaran encima y tuve que socorrerlo.
Diablos, a veces Sai decía las cosas más inapropiadas en el momento menos adecuado, y con esa maldita sonrisa en su rostro.
- Tú, ¡maldito! ¡Te juro que te voy a…
- Cálmate, Naruto-kun. Sabes que es cierto, ¿o me equivoco?
Preferí no hablar. Aunque detestara admitirlo, era verdad… A excepción de la última parte.
- Bueno, me voy a clases. Hasta pronto Naruto-kun, Sakura-san – y por fin se fue.
- ¿Es cierto lo que dijo Sai? – preguntó Sakura luego de aquel incómodo silencio que se hizo.
- ¡Claro que no! Ya, vámonos a clases’ttebayo – me dispuse a avanzar, pero la chica que tenía en frente me detuvo.
- Naruto, te conozco desde siempre.
- ¿Qué quieres decir con eso?
- Quiero decir que sé cuando algo te está disgustando. ¿Qué es lo que te sucede? – esta vez sonó más preocupada.
- Nada, en serio…
- No me mientas.
Bueno, Sakura era de confianza y tenía razón, no podía mentirle. Así que finalmente me decidí a hablar.
- Es sólo que… creo que estoy recordando algo…
- ¿Que tú qué? – se sorprendió al escucharme.
- Lo que escuchaste’ttebayo –
- ¿Qué te hace pensar eso?
- Hace días que tengo el mismo sueño.
- ¿Qué sueñas?
- Siempre sueño que corro desesperado hacia un muelle para encontrarme con alguien. No sé qué diablos significa, pero se siente tan real… Siento como si de verdad hubiera estado allí… - me callé un momento para escuchar la opinión de mi amiga, pero no decía absolutamente nada - ¿Tú qué crees que signifique? – le pregunté directamente, pero aún así no obtuve respuesta - ¿Sakura-chan?
- ¿Eh? – reaccionó al fin.
- ¿Qué es lo que piensas’ttebayo?
- ¿Y-Yo? No lo sé, Naruto.
- ¿No recuerdas haber estado alguna vez allí conmigo?
- No…
Nuevamente ambos guardamos silencio.
- Naruto, ¿puedo preguntarte algo?
- Dime.
- ¿Con quién te encuentras en tu sueño?
- No lo sé… Nunca consigo ver su rostro, es raro…
- Pero ¿es hombre o mujer?
- Hombre, creo… ¿A qué viene esa pregunta? – me extrañó que a Sakura le interesara tanto ese detalle.
- No, no es nada, simple curiosidad – rió, a mi parecer, nerviosa – Bueno, es mejor que te vayas a clase. Hace tiempo que debes ese trabajo.
- Oh… El trabajo… Verás, Sakura-chan, yo… no lo hice…
- ¡Naruto baka!, ¡te dije que lo hicieras! ¡¿Por qué no lo hiciste?!
- Es que… lo olvidé’ttebayo. Bueno, supongo que, como no lo hice, no tengo nada que hacer aquí.
- No señor, nada de eso, ¡a clases! No dejaré que sigas rehuyendo tus deberes y que sigas ausentándote, ¿quedó claro?
- Sí, Sakura-chan… - suspiré derrotado.
- Ya, ¡andando! – apuntó con el dedo el camino que debía seguir.
Sabía que no podía contradecirla, así que resignado tuve que hacerle caso. ¡Malditos estudios!, ¡maldito futuro!, ¡maldito todo! En serio que no tenía ganas de seguir ahí perdiendo mi tiempo. Honestamente detestaba lo que estudiaba. “Arquitectura”, que asco. Digo, me gusta el arte, pero ¿arquitectura?, jamás imaginé que pudiera ser algo tan aburrido y estresante, yo pensaba que era más divertido, ahora veo que me equivoqué. Aunque prácticamente me vi obligado a elegir esa carrera. En fin…
De mala gana entré al edificio para dirigirme hacia el aula. Ya estaba doblando la esquina del pasillo hasta que, inesperadamente, resbalé al no notar el pequeño letrero que me advertía del piso mojado. No podía ser un día peor…
Estiré mis brazos para sujetarme de lo primero que mis manos pudieron percibir, entonces caí sobre ¿alguien? Rápidamente recuperé la postura para identificar al individuo que yacía bajo mi cuerpo. Un chico de tez blanca, casi fantasmal, de ojos y cabello negro. Un chico que jamás había visto por esos lados…
- Y-Yo ¡Lo siento! – sentí mis mejillas arder por la vergüenza. Noté sus libros regados en el piso debido a la caída y me dispuse a recogerlos mientras él se levantaba – S-Se te cayó esto – extendí mis brazos para entregárselos, pero desvié la mirada. No podía verle a la cara después de lo ocurrido. Sin embargo, no los tomaba. Supuse que algo andaba mal así que decidí mirar hacia el frente una vez más. Para mi sorpresa, el chico ya no estaba allí.
Y pues, eso. Insúltenme(?) Por si las moscas, esto lo había subido a AY hace un buen rato e-é
Saludosh~
Saludosh~
Última edición por Conito~ el Dom Jul 31, 2011 5:55 pm, editado 2 veces
ConniesomnieTemporal 
Get your crayon, crayon~
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15/08/2010
ShikaTema | ItaSasu | MinaKushi | JoonxMir | JongKey | GD&TOP
Naruto | Gravitation | Jigoku Shōjo | Death Note | Sekaiichi Hatsukoi
Naruto SD Rock Lee no seishun full-power ninden
900 円
Trade! 2-
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Celty Lun Jul 04, 2011 2:06 pm
Me encanta! hace rato que esperaba que subieras un fic, me gusta mucho tu forma de escribir y describir, ademas que la historia se ve muy interesante.
Continualo
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CeltyNaruSaku Club 
- Sacudo, sacudo, sacudo
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por lexie Miér Jul 06, 2011 12:17 pm
Estoy de acuerdo con Black, Conito~
+1 HERMOSO!, me encantó la historia estabas megainspirada, se nota xD
De verdad, linda, debes continuarlo. Quiero saber que pasará después con el pobre de Naruto ...
Parece que está destinado a sufrir FOREVAH por su Azabache u.ù
see you C:
+1 HERMOSO!, me encantó la historia estabas megainspirada, se nota xD
De verdad, linda, debes continuarlo. Quiero saber que pasará después con el pobre de Naruto ...
Parece que está destinado a sufrir FOREVAH por su Azabache u.ù
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lexieFrecuente 
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Miyusaki yue Lun Jul 11, 2011 4:01 pm
me encanto esta super ![El muelle de la regresión [Longfic] 261274](/users/2614/38/02/60/smiles/261274.gif)
x fa sigue con la historia me dejaste bien intrigada ![El muelle de la regresión [Longfic] 322921](/users/2614/38/02/60/smiles/322921.gif)
x fa sigue con la historia me dejaste bien intrigada 
Miyusaki yueNuev@ 
- pensando
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23/05/2011 sasunaru-naruhina-sasusaku-narusasu-misakiusui-yuetaiyo-misaokyo-sanakokyohei-minatokushina-ichigorukia DRAGÓN BALL-NARUTO-BLEACH-BLACK BIRT-KIRAI-PERFECT GIRL EVOLUTION-ETC sakura/ikimono gakari- besame/camila 5 円
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Dom Jul 31, 2011 5:47 pm
Gracias a quienes leyeron, me hacen feliz *U*
Y ahora sí, traigo capítulo, y se viene largo muohoho~
Omítase cualquier falta de ortografía por mi parte, si es que hay xD
Y ahora sí, traigo capítulo, y se viene largo muohoho~
Omítase cualquier falta de ortografía por mi parte, si es que hay xD
- Capítulo 2: Melodía:
- Estaba confundido. Digo, ¿qué pudo haberle sucedido a ese chico para salir corriendo de esa forma? No habrá tenido nada que ver conmigo, ¿cierto?, lo único que hice fue chocar con él… y… caer sobre él… y luego exaltarme, pedirle disculpas casi desesperado, rojo de vergüenza, recoger sus libros y ofrecérselos como cualquier persona lo haría. No fue algo premeditado, no hice nada malo, no hice nada impropio… ¿o sí?…
Tsk, Naruto ¡¿por qué te cuestionas tanto?! No tuviste la culpa de nada. Ya, olvídalo, no tiene caso.
Pero no puedo, ni aunque me auto-convenza a mí mismo en tercera persona. No puedo dejar de pensar en lo ocurrido, no sé por qué, si no es algo para nada relevante, es un simple hecho casual, parte de la vida cotidiana de cualquier individuo, a todos les podría pasar. Sin embargo me pasó a mí… Diablos, de vuelta a lo mismo. Quiero olvidarlo pero no puedo. ¡¿Por qué razón le doy tanta importancia a algo tan estúpido?! no me lo explico. ¿Es por la vergüenza que me causó?, o acaso fue…
- Naruto-kun, ¿te encuentras bien?
Suspiraría de alivio pero sería demasiado notorio. Me alegro de que Sai interrumpiera mis disparatadas reflexiones, ya me estaba asustando de lo que podría llegar a pensar.
- Claro que estoy bien, ¿qué te hace pensar lo contrario’ttebayo? – recobré la postura.
- Desde que llegamos has estado con la mirada perdida. Ni siquiera has tocado tu comida y eso que sueles volverte loco por el ramen – me explicó como si le hiciera gracia.
Al parecer no puedo evitar ser totalmente obvio cuando algo me tiene intranquilo. No tengo remedio…
- No me sucede nada, ¿de acuerdo? – en serio ya me estaba fastidiando.
- Vamos, puedes contarme. Soy de completa confianza.
Estaba bromeando, ¿no? Sai, ¿de confianza?, sí, claro. Tuve que contener una carcajada para evitar reírme en su cara.
- Por favor, Sai. ¿Desde cuándo eres tan benévolo conmigo?
- Desde que me preocupo por ti, Naruto-kun.
Bien, honestamente esa aseveración me sorprendió un poco.
- Con que te preocupas por mí, ¿eh?
- Somos amigos, ¿no? – me sonrió como siempre lo hace.
Me suena convincente, lo admito. Pero aún así, por más persuasivo que trate de ser, no cederé. No señor, no cederé.
- Si te digo lo que me pasa, ¿prometes no decirle al respecto a Sakura?
- Te lo prometo.
En fin, cedí… Únicamente porque en serio necesito desahogarme.
- Es que… esta mañana me ocurrió algo de camino a clases. Fue algo completamente estúpido, pero por alguna razón no puedo dejar de pensar en ello.
- Y eso fue…
- Resbalé y choqué con un chico. Bueno, mejor dicho, caí sobre él. Le pedí disculpas y me dispuse a recoger los libros que se la habían caído al piso por mi culpa, pero en el momento en que se los ofrecí, él… huyó de mí. No entiendo por qué no puedo olvidarme de eso – apoyé el mentón sobre la mesa obviando mi agotamiento y frustración debido a aquella situación que no dejaba a mi mente en paz. Observé a Sai, quien sonreía como de costumbre.
- Comprendo lo que te sucede, Naruto-kun.
- ¿En serio?
- Claro. Te gustó, ¿no es así?
- ¿Gustarme?, ¿qué cosa’ttebayo? – no entendí a qué se refería.
- Aquel chico te gustó, por eso te sientes de esa forma.
- ¡¿Que a mí qué?! ¡Por supuesto que no, idiota! Es la primera vez que lo veo, además, es un hombre. Eso es imposible.
- ¿Desde cuándo te importa el sexo de la persona?, ¿qué me dices de Gaara?
Golpe bajo. Diablos, tan típico de Sai el decir cosas impropias.
- No hay nada entre él y yo. Nunca lo hubo y nunca lo habrá – quise sonar tajante al respecto.
- Lo siento si te molesté, pero tú y yo sabemos lo que le ocurre a Gaara-kun contigo.
- Ese no es el punto. Ni siquiera estábamos hablando de eso, ¿podemos volver al tema, por favor?
- Está bien, está bien. Entonces, no entiendes por qué no puedes olvidarte de lo ocurrido…
- No. Bueno, ahora que lo pienso bien, supongo que me intriga saber por qué huyó de mí, eso es todo.
- y ¿por qué no vas y lo enfrentas directamente?
- Porque no lo conozco, Sai, ya te lo dije. Además, tampoco recuerdo muy bien su rostro, lo vi fugazmente.
- Hmm… Dijiste que habías recogido sus libros, ¿no?
- Sí, ¿qué tiene que ver eso?
- Dámelos.
- ¿Para qué’ttebayo?
- Lo más probable es que haya algo en ellos que nos dé una pista sobre quién es ese chico.
Ingenioso. No, la verdad no tanto. Fácilmente se me pudo haber ocurrido a mí, pero estaba demasiado ocupado fatigándome al pensar en ello. Le hice caso y cogí mi mochila para sacar de ella los objetos que me había solicitado para entregárselos. Sólo esperaba que su plan funcionase de algo. Tomó uno de los susodichos libros y comenzó a hojearlo tranquilamente. Me dediqué a observarlo con un mínimo de esperanza de que hallara lo que buscábamos.
- Es un libro sobre arte contemporáneo.
- ¿Arte? Eso… quiere decir que… ¿irá a las mismas clases que yo?
- Es lo más probable, de seguro te lo encuentras mañana – continuó hojeando el libro. De repente una sonrisa de satisfacción se dibujó en su rostro - Con que Uchiha Sasuke…
- ¿Qué?
- Ese es su nombre, Naruto-kun. Aquí está escrito – me entregó el objeto para que lo comprobara por mí mismo.
- ¿Uchiha… Sasuke? – era extraño. Su nombre se me hacía conocido, como si lo hubiera escuchado antes.
- Mira esto – Sai me entregó otro de sus libros, aunque este era más como un bloc de dibujo. Comencé a hojearlo, lo observé fascinado.
- Dibuja muy bien’ttebayo.
- Y ahora que sabes más o menos de quién se trata, ¿le hablarás para aclarar las cosas?
- No lo sé, la verdad… - miré el reloj de reojo intuitivamente. Ya se me había hecho tarde – Tengo que irme – me paré de la mesa e introduje los libros de vuelta en mi mochila para largarme de allí.
- Te acompaño hasta la puerta – se ofreció Sai.
- No, no te preocupes’ttebayo.
- De acuerdo. Espero haberte sido de ayuda.
- Sí, gracias, Sai. Necesitaba desahogarme. Ya sabes, ni una palabra a Sakura sobre esto.
- No romperé mi promesa, Naruto-kun – me sonrió.
- Me parece. Bueno, ¡te veo mañana! – y salí finalmente de ahí para dirigirme a casa.
Aunque no tenía que caminar tanto, pues Sai prácticamente vive a dos casas de la mía. Aún así es un problema para mí el llegar tarde. ¿Por qué?, por mi compañero de casa. Siempre me interroga por todo. En fin, es algo complicado de explicar…
- ¡Ya llegué! – miré a los alrededores buscando por cierta persona, quien, por supuesto, estaba allí esperándome.
- Llegas tarde - habló tranquilamente mientras dirigía su mirada hacia la mía.
- Sí, lo siento. Me quedé hablando con Sai.
- ¿Quieres comer algo?
- No, gracias. Comí en casa de Sai – mentira, ni siquiera probé el ramen instantáneo que me había servido.
- ¿Seguro?
Asentí y me lancé sobre el sillón. Rehuí su mirada. Trato de evitarlo, como sea. Se entiende el por qué. Sin embargo, prontamente escuché sus pasos aproximándose hasta que aprecié su presencia sentada a mi lado. Sí, sabía a qué venía.
- Naruto, sobre lo que pasó…
- Gaara, olvídalo. No quiero hablar sobre eso.
- Nunca quieres hablar sobre eso.
- No, no quiero y tú sabes por qué – me paré dispuesto nuevamente a evitar la conversación.
- No, no sé por qué – me tomó de la muñeca para retenerme – Naruto, escúchame.
Este es otro de los asuntos que me tienen cansado. Hastiado, hartado… más que hartado.
- Tú escúchame a mí, Gaara. Lo que sucedió la otra noche no significa nada, supéralo. Sólo quiero estar bien contigo, eres mi amigo. Esa fue la primera y última vez, no va a volver a suceder. No quiero que te confundas’ttebayo, compréndelo, por favor.
- Te quiero.
Siempre es lo mismo. Sólo suplico en vano, no sé por qué me esfuerzo.
- Gaara, basta. Yo… no…
- No me quieres, lo sé.
- Sí… te quiero. Pero no de esa forma.
- Entonces dime qué puedo hacer para cambiar eso.
- No puedes hacer nada, entiéndelo. No puedo estar contigo.
- ¿Por qué no?
- Porque no y punto. Es más, no puedo estar con nadie – eludí su agarre para encerrarme en mi habitación.
Apoyé la espalda en la madera y me quedé allí por un muy buen rato, en completo silencio. Segundos más tarde escuché el inminente portazo efectuado por Gaara al encerrarse en su habitación al igual que yo. Suspiré cansado…
¿Qué fue lo que sucedió?, se preguntarán ustedes. Pues, lo obvio.“No hay nada entre él y yo. Nunca lo hubo y nunca lo habrá”
Sí, sólo otra de mis mentiras. Tuvimos sexo, eso es lo cierto. Pero en serio que ahora me arrepiento. Es mi culpa al fin y al cabo. Es mi culpa el sentirme culpable por no corresponder sus sentimientos, y por eso accedí. Porque siempre está encima de mí, insistiéndome continuamente sobre el mismo tema. Y al observar la expresión que se forma en su rostro cuando le digo que no, me siento como el peor desgraciado del mundo. No obstante, cuando finalmente le digo que sí y terminamos en la cama, vuelvo a sentirme como el peor desgraciado del mundo al percatarme de que sólo lo utilizo para satisfacer mis necesidades carnales. Que mierda de persona soy…
¿No habré sido muy duro con él? Y si… ¿le pido disculpas?
Naruto, no. ¡Date cuenta! Si haces eso que estás pensando, sabes cómo terminará todo. Con otro revolcón por lástima…
Pero… ¿acaso eso no sería lo correcto?… Diablos, soy tan débil e ingenuo. En fin… acabo de girar la perilla de su puerta. Tarde para retractarme.
- ¿Gaara? – susurré mientras me adentraba en la oscuridad del cuarto. Noté su silueta descansando sobre la cama y decidí recostarme a su lado. Estaba boca abajo, por lo cual le toqué el hombro para obtener su atención – Oye, ¿estás dormido’ttebayo?
- ¿Qué es lo que quieres? – volteó el rostro para hacerme frente. Noté el resentimiento en sus ojos.
- Yo… quería pedirte disculpas. Lo siento, no medí lo que dije, no fue mi intención. Es sólo que… no quiero dañarte, entiéndeme. Pero no importa lo que haga, te hiero de todas formas. Todo esto es mi culpa…
Su manera de mirarme cambio repentinamente.
- No, Naruto. Tú perdóname a mí, soy yo quien tiene la culpa por presionarte y casi obligarte a hacer algo que no quieres.
- Pero a fin de cuentas soy yo el que accedió a hacerlo. Soy yo el que te da falsas esperanzas y el que te causa angustia.
- Tú no me causas angustia, tonto. ¿Cuándo aprenderás, Naruto?, ¿Cuándo dejarás de culparte por absolutamente todo? Eres tú el que está angustiado a causa de ello, siempre te auto-flagelas mentalmente, y no quiero que lo hagas. No quiero que te sientas de esa forma. Eres una muy buena persona, por eso me gustas tanto – comenzó a acariciar mi cabello para reconfortarme. Un peligroso impulso me obligó a besar su mejilla a modo de agradecimiento.
- Gracias por tus palabras… - murmuré un tanto conmovido.
Prontamente acortó la mínima distancia entre nosotros. Tuve la intención de rehuirlo, pero ya qué. Mi actual estado vulnerable no me lo permite, no tengo ánimos. Cerré los ojos y sentí sus labios apenas rozar los míos.
- Quizás no te conozca hace tanto, pero sé cuál es tu historia, la razón de tu malestar. Por supuesto sé como sufres a diario. Desde que vivimos juntos nunca te he visto verdaderamente feliz. Y eso es lo único que quiero… Quiero que seas feliz, déjame hacerte feliz, Naruto… Déjame ser yo quien te haga olvidar todos esos problemas que te afligen. Eso es lo único que pido…
- Ojalá las palabras o las caricias fueran capaces de remendar a alguien que no puede ser remendado. No tienes idea de cuánto quiero ser feliz, pero… hay algo que perdí, y si ese algo no vuelve a mí no sería más que una persona incompleta y, por lo tanto, una persona incapaz de ser feliz. No es algo fácil de entender.
- ¿Y si yo pudiera darte ese algo?
- No, no puedes.
- ¿Por qué?
- Porque ni siquiera sé que es ese algo que no tengo. Y como no lo sé, no lo puedo obtener.
- Yo buscaré ese algo por ti.
- ¿Por qué eres así conmigo?
- Porque te quiero.
- ¿Tanto?
- Decir que haría lo que fuera por ti ¿responde a tu pregunta?
No lo entiendo… Simplemente no entiendo como puede apreciarme a tal punto.
- … No lo hagas, Gaara. No es necesario que sacrifiques tu propia felicidad por la mía si no vas a recibir lo que yo no puedo darte – mi voz se quebraba por el llanto que amenazaba con salir - … Lo siento. No… quiero hablar más… - sequé mis lágrimas.
Sus brazos se enredaron en mi cintura para acercarme más hacia su cálido cuerpo. El nudo en mi garganta estaba matándome, no podía contenerme más, no podía…
- Desahógate.
Y lo hice. “Desahógate”, fue como una palabra mágica que me hizo sollozar súbitamente.
… Por un largo instante…•••
Abrí los ojos, exaltado. Mi visión apuntaba hacia el cielo nuboso apenas iluminado, opacado por las hojas de los arboles que se entrecruzaban a voluntad del viento frío que traía consigo invisibles partículas de agua de mar. Volví a percibir aquel embriagante olor, el incomparable perfume de los eucaliptus. Me levante con cuidado y observé aquel entrono que me envolvía. Estaba allí otra vez…
De pronto, una ensordecedora melodía arribó a mis oídos.“Koibito no
Shiroi tenohira ni hitotsubu
Ochita sapphire” 1
Mi corazón brincó hasta mi garganta dejándome casi sin aliento. Rápidamente comencé a buscar desesperadamente a aquella persona que entonaba dichas palabras. Y entonces recordé el muelle…
Empecé a avanzar con paso diligente entre los troncos de los árboles cuesta abajo hacia la costa.“Nagusame ni fureta
Yoru ni umaretekita
Muku na shizuku ga
Hikari ni naru” 2
Por fin lo vi… Como lo había sospechado, era él. Ahora podía verlo bien, sentado de espaldas a la orilla de dicho muelle. Cantando aquella canción…
Me acerqué lentamente. Quería ver su rostro de una vez por todas.“Kanashimi sae anata no te de
Aoi houseki ni kawaruno
Amai toiki furui nageki
Subete nomihoshite kuretara
Soba ni iruwa” 3
Me senté a su lado…
Desperté. A duras penas pude abrir los ojos, me dolían. Debía tenerlos hinchados por quedarme dormido mientras lloraba. Miré a mi lado, Gaara estaba sumido en el sueño. Sus brazos aún aprisionaban mi cuerpo, por lo que los quité con cuidado para poder regresar a mi habitación.
Cerré la puerta sigilosamente para evitar despertarlo y me dirigí a mi cuarto. Me observé en el espejo que estaba en la pared, tenía una cara horrible. Pero bueno, era de esperarse…
El sueño que había tenido esta vez fue aún más extraño e indescifrable que el anterior. Esta es la cosa que más me estresa, el no saber qué rayos significan estos sueños, el no saber qué rayos me quieren decir.
Gaara tiene razón, me auto-flagelo mentalmente. No quiero pensar más en ello, no lo voy a hacer. Mañana será un mejor día. O tal vez no, sólo trato de pensar positivo.•••
- ¿Qué tal tu regreso a clases? – preguntó la chica que caminaba a mi lado.
- Hum… Bastante… singular’ttebayo.
- ¿Singular? ¿A qué te refieres?
- No, a nada. Olvídalo, Sakura-chan – miré el piso – Oye…
- Dime.
- Sai… no te ha comentado nada, ¿verdad? – Tsk, yo y mi bocota.
- No, ¿acaso hay algo que deba decirme? O mejor dicho ¿acaso hay algo que tú quieras decirme?
- No, no, para nada – reí nervioso – Es sólo que Sai siempre está diciendo cosas fuera de lugar y pensé que… quizás te había dicho alguna estupidez sobre mí, eso es todo – volví a reír.
- Lo que tú digas, Naruto…
Tengo que aprender a callarme.
- Bueno, yo me voy a clases.
- De acuerdo, te veo a la salida entonces.
- Ah-ha.
Tomamos caminos opuestos. Me dirigí al edificio de mala gana, y cuando entré fue que lo escuché…“Koibito no
Shiroi tenohira ni hitotsubu…”
Me quedé como quien ve visiones. Completamente desconcertado.
- Esa… es…
La canción que escuché en mi sueño. Y esa voz… era la misma, idéntica a la de él.
Corrí frenético por el pasillo guiándome por el sonido de su voz. Entonces doble en la misma esquina en la cual choqué con ese chico ayer. Y lo vi…
No… podía ser…
1 “En la palma blanca de un amante un grano cayó, era un zafiro”
2 “Cuando el desahogo es alcanzado, una gota de pureza que nació bajo la noche se transforma en luz”
3 “Hasta la tristeza se convierte en una joya azul en tus manos. Si los dulces suspiros y las viejas tristezas fueran bebidas de un sólo trago, estaría a tu lado”
Y well, eso. La canción que usé se llama "Sapphire", es del grupo Kalafina e-é La usé porque... se me dio la regalada gana, fin xDDDD Nah, ya sabrán por qué. Escúchenla para que se hagan a la idea de como era aquella melodía >:3
Y ahora, me voy.
-wooshhh-
Y ahora, me voy.
-wooshhh-
ConniesomnieTemporal - Get your crayon, crayon~
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24 15/08/2010 ShikaTema | ItaSasu | MinaKushi | JoonxMir | JongKey | GD&TOP Naruto | Gravitation | Jigoku Shōjo | Death Note | Sekaiichi Hatsukoi Naruto SD Rock Lee no seishun full-power ninden 900 円 Trade! 2 -
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Celty Dom Jul 31, 2011 7:41 pm
No! esta demasiado bueno tu fic.
Me encanta, me fascina, adoro y celo tu manera de escribir. Ademas que la historia cada vez se pone mas interesante, te lo ruego seguí subiendo capítulos.![El muelle de la regresión [Longfic] 287108](/users/2614/38/02/60/smiles/287108.gif)
Me encanta, me fascina, adoro y celo tu manera de escribir. Ademas que la historia cada vez se pone mas interesante, te lo ruego seguí subiendo capítulos.
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Vie Ago 05, 2011 11:02 am
theblackangel escribió:No! esta demasiado bueno tu fic.
Me encanta, me fascina, adoro y celo tu manera de escribir. Ademas que la historia cada vez se pone mas interesante, te lo ruego seguí subiendo capítulos.
Thank ya *-------------------* y por supuesto que seguiré subiendo más capítulos, como crees que lo dejaré así e_é
Pronto subiré muohoho~
ConniesomnieTemporal - Get your crayon, crayon~
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por gaara-sama Sáb Sep 10, 2011 2:07 pm
![El muelle de la regresión [Longfic] 184801](/users/2614/38/02/60/smiles/184801.gif)
neeeeeeeeeee y la contiiiiiii ??????????? ![El muelle de la regresión [Longfic] 70121](/users/2614/38/02/60/smiles/70121.gif)
que es esoooooooooo nooooooooo me dejastes cortadaaaaaaaaa ![El muelle de la regresión [Longfic] 442402](/users/2614/38/02/60/smiles/442402.gif)
me encantooo ahora debes seguuuuuuuuuuuuiiiiiiiiiiiiiiirrrr ![El muelle de la regresión [Longfic] 154817](/users/2614/38/02/60/smiles/154817.gif)
gaara-samaNuev@ - perdida entre en las nubes esponjosas de algodon
30 46 0 13/08/2011 sasunaru itadei gaasai misakiusui kakairu usuimisaki naruto kaichou wa maid sama cosplay complex death note bleach etc... taxi taxi taxi girls generation 5 円
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Kuroko Sáb Sep 10, 2011 2:30 pm
wooo y dije mande *o* cuando no lo vi es muy bueno piensas seguirle verdad?? es muy buena la historia, aunque aqui es algo complicado seguirle, y en FF no has pensado tmb en subirla???
KurokoRutinario 
- Trabajando~
![El muelle de la regresión [Longfic] Editor](https://2img.net/h/i1239.photobucket.com/albums/ff503/marce-chankidaFC/Editor.png)
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18/07/2011 •RoyEd•1827•R27•NaruIno•GwIch• •D.Garyman•FullMetal Alchemist•Durarara•KHR•Bleach• Kuroko No Basuke 2.160 円 Intranet
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Flo_Kuran Dom Sep 11, 2011 1:57 am
Ahhhhhhhhhhh, no me dejes con la intriga ![El muelle de la regresión [Longfic] 856194](/users/2614/38/02/60/smiles/856194.gif)
Esta demasiado bueno
Debo aprender a no leer Fics que estan ongoing.. no me gusta esperar
Esta demasiado bueno
Debo aprender a no leer Fics que estan ongoing.. no me gusta esperar
Flo_KuranNuev@ - 40 47 0 21/06/2011 NaruSasu; SasuNaru
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Kuroko Dom Sep 11, 2011 6:47 am
jaajajajaja, bueno dejando el hecho de que al pobre gaara lo dejo desinflado y que naru es medio sufrido me encanta sasuke!!!! seeee
A lo mas seguro es que naru perdio la memoria, sakura sabe y no le kiere decir y sasu volvio para poder estar con el, ¿sera?
A lo mas seguro es que naru perdio la memoria, sakura sabe y no le kiere decir y sasu volvio para poder estar con el, ¿sera?
KurokoRutinario - Trabajando~
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14 18/07/2011 •RoyEd•1827•R27•NaruIno•GwIch• •D.Garyman•FullMetal Alchemist•Durarara•KHR•Bleach• Kuroko No Basuke 2.160 円 Intranet
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Mar Sep 20, 2011 12:01 pm
Hola, hola! perdón por la demora x'DDDDDDDDDD
Omítase cualquier falta de ortografía, es que escribí rápido xD
Ya, ahora sí~
Omítase cualquier falta de ortografía, es que escribí rápido xD
Ya, ahora sí~
- Capítulo 3: Sasuke:
- Estaba apoyado en el marco del ventanal a tan sólo unos metros, dándome la espalda. Yo lo observaba a la distancia, aún estático por el gran desconcierto que me causó escucharle entonar dicha canción, la cual seguía interpretando en tono bajo.“Kanashimi sae anata no te de
Aoi houseki ni kawaruno
Amai toiki furui nageki
Subete nomihoshite kuretara
Soba ni… iru wa…”
Su voz de repente pareció quebrarse. ¿Lloraba? El apenas audible sollozo comprobó lo que sospechaba. Me sentí conmovido. De algún modo me nació una intensa necesidad de confortarlo, quería saber que era lo que le ocurría.
Me acerqué cautelosamente hacia él. Tragué saliva antes de hablar, pues tampoco podía obviar mi nerviosismo.
- Oye, ¿estás… bien?
El chico respingó al escucharme. Noté como rápidamente llevaba su puño derecho hacia su rostro para secar sus lágrimas. Luego carraspeó de forma sutil, haciendo ademán de que tomaría la palabra. Sin embargo, no emitió sonido alguno.
Traté de acercarme más para poder verlo de frente, pero desvió la mirada amenazado por mi contacto visual.
- ¿Me escuchaste? – volví a cuestionar mientras me posicionaba de cualquier forma con tal de verle a la cara. Pero no importaba lo que hiciera, me esquivaba como le fuera posible.
Diablos, que desesperación. Esto ya se está tornando ridículo.
- ¡Deja de moverte y mírame’ttebayo! – demandé inconsciente. El chico bufó y finalmente se volteó resignado ante mi extrema insistencia.
- ¿Qué? – preguntó en tono monocorde.
A penas pude observarle bien. El flequillo pelinegro, un poco alborotado, cubría parte de sus ojos. ¿Tanto le complicaba que lo viera así? No es como si nunca hubiera visto a alguien llorar.
Alcé ambas manos y las dirigí hacia aquella molesta porción de cabello para descubrir su mirada. Aparté cuidadosamente el flequillo y lo acomodé detrás de sus orejas.
- Así está mejor, ¿no lo crees? – Esbocé una sonrisa – Ahora, repito la pregunta. ¿Estás bien?
Me miró extrañado.
- ¿Por qué te importa? No me conoces.
Entonces me pregunté lo mismo…
- Pues, porque… no lo sé. Sólo… sentí la necesidad de ayudarte, supongo… ¿Te estoy incomodando?
- Un poco…
- Lo siento, no fue mi intención. Pero tienes razón. No soy quién para andarte cuestionando – iba a disponerme a irme, pero…
- Yo no he dicho eso.
- Pero tú… me preguntaste…
- Fue una pregunta, nada más.
- … Eres extraño, ¿sabes?
El chico cerró los ojos y sonrió de medio lado.
- Y tú bastante impulsivo.
- Sí, lo sé. Me lo han dicho muchas veces – inflé las mejillas. Esta vez su sonrisa se ensanchó para luego soltar una pequeña carcajada - ¡Te hice reír’ttebayo! – golpeé suavemente su hombro con mi puño izquierdo, a lo que él chistó con la lengua.
Abrió los ojos nuevamente para posarlos en los míos por un momento. Lo observé detenidamente… Me llamó la atención la forma en la que me miraba, como entre nostálgico y enternecido. Agaché el rostro un poco intimidado.
Me alarmé al escuchar pasos aproximándose, debía ser un profesor. Y recordé que tenía que haber entrado a clases hace minutos.
Lo único que se me ocurrió hacer fue tomar al chico del brazo e ir en busca de alguna salida para evitar ser descubierto capeando clases.
- Oye, ¿a dónde me llevas?
- Tú cállate y sígueme – me limité a responder concentrado en mi objetivo.
Después de correr un rato a través de los pasillos del edificio, divisé la puerta que conducía a las escaleras. Bingo, aquel lugar sería perfecto para que no nos encontraran. Abrí la puerta y comenzamos a subir por los peldaños.
- ¿Me dirás ahora a dónde vamos? – volvió a preguntar.
- Ya lo verás’ttebayo – le sonreí, luego seguimos subiendo.
Fueron doce pisos los que recorrimos para poder encontrarnos con el sitio al que deseaba llegar. Empujé la puerta con esfuerzo y los rayos del sol dieron a mis ojos.
- La azotea – afirmó al observar el entorno.
- Sí, aquí vengo cuando quiero olvidarme de todo. Y cuando me da flojera entrar a clases’ttebayo – admití – Soy Uzumaki Naruto – olvidé que no me había presentado - ¿Y tú eres…?
- Uchiha Sasuke.“- Con que Uchiha Sasuke…
- ¿Qué?
- Ese es su nombre, Naruto-kun. Aquí está escrito”
- Uchiha Sasuke… ¡¿Tú eres Uchiha Sasuke?! – pregunté completamente incrédulo.
- ¿Caíste sobre mí y ni siquiera me recuerdas?
- Es que… te vi pasajeramente. Lo siento por eso, tenía muchas cosas en la cabeza, estaba pasando un pésimo día. No me había fijado en la advertencia de piso mojado, mucho menos en que tú venías por ahí. Lo siento, lo siento – me disculpé desesperado.
- No es necesario que te excuses tanto. Sólo fue un accidente.
- Bueno, sí… S-Supongo… - aproveché las circunstancias para preguntarle lo que desde ayer ansiaba saber – Oye, ¿puedo… preguntarte algo?
- ¿Qué?
- Sobre lo que pasó ayer. Después de que chocamos… ¿por qué saliste corriendo así? Ni siquiera tomaste tus libros. O ¿es que acaso algo anda mal conmigo?
Sasuke se quedó pensativo un momento.
- Por supuesto que no.
- ¿Entonces?
- También estaba pasando un mal día, eso es todo.
- Oh… Y ¿aún lo estás pasando?
- Sí, eso creo… - se apoyó en la baranda de la terraza.
- ¿Te molesta si te pregunto por qué?
- No, pero preferiría no hablar de eso…
- La mayoría de las veces hablar de tus problemas ayuda a apaciguar como te sientes.
- Con que sí, ¿eh?
- Eso es lo que se le llama “quitarse un peso de encima”. Créeme, lo sé mejor que nadie’ttebayo. Estoy seguro de que tengo muchos más problemas que tú. Y cuando algo me aqueja siempre suelo expresárselo a alguno de mis amigos. Ellos me ayudan a encontrar una posible solución, pero, lo que es más importante, me escuchan, y eso me tranquiliza – lo miré fijamente al igual que él lo hacía.
- ¿Tan empeñado estás en ayudarme?
- No me gusta ver a la gente triste, por eso siempre trato de hacer algo para animarla. Aunque es bastante contradictorio, pues estoy triste o decaído la mayor parte del tiempo y se me hace imposible animarme autónomamente – una amarga sonrisa se formó inconsciente en mis labios.
Sasuke desvió la mirada hacia el horizonte, luego suspiró a la vez que cerraba los ojos.
- No es en realidad un problema, si no simple melancolía.
- ¿Cosas del pasado?, ¿recuerdos?
- Sí.
Así que recuerdos…
- Que coincidencia’ttebayo – mascullé.
- ¿Por qué coincidencia?
- Porque a mí me pasa exactamente lo mismo que a ti, sólo que es más complicado, mucho más complicado…
- ¿A qué te refieres?
- Me refiero a que supongo que tú no te caíste de una escalerilla, te golpeaste la cabeza y perdiste la memoria a los doce años como yo.
- ¿En serio eso te ocurrió?
Asentí con la cabeza gacha.
- No he sido el mismo desde entonces. Aunque bueno, tampoco recuerdo muy bien como era antes.
- Y ¿no recuerdas absolutamente nada?
- Sí, recuerdo algunas cosas. Pero la mayoría de ellas las recordé gracias a mi familia y mis amigos, ellos solían hablarme sobre ciertos sucesos para poder orientarme – guardé silencio un momento – Sin embargo… aún siento que hay algo que me falta recordar, algo importante’ttebayo. Pero simplemente no puedo hacerlo, por más que trate de pensar, no puedo… Sigue oculto en algún rincón de mi cerebro, yo lo sé. Eso es lo que me estresa tanto, que está allí y no puedo descubrirlo.
- ¿Qué te hace pensar que puede ser importante?
- Sueños que he tenido este último tiempo, siempre son los mismos. Son tan extraños y tan desesperantes. En cada uno de ellos me veo desolado en medio de un bosque. De pronto, comienzo a correr en búsqueda de algo o alguien incógnito que en ese momento ni siquiera yo mismo lo sé… Hasta que lo encuentro y algo en lo más profundo de mi ser me convence de que aquello es lo que busco. Entonces mi corazón se dispara y me siento de una forma tan… extraña, pero también tan intensa que duele. Cada vez que veo esa imagen frente a mis ojos es así, por eso sé que pudo haber sido algo importante que me ocurrió en el pasado. Porque lo que experimento es tan real, tan palpable… Es como un constante deja vu. Si sueño eso por algo debe ser, ¿no? Siempre que trato de descifrarlo no logro conseguirlo, por eso siento tanta impotencia…
De pronto quise llorar. Nunca le he dicho esto a nadie, ni siquiera a Sakura que es mi mejor amiga. Digo, sí se lo había comentado, pero sólo lo expresé de manera superficial, de tal forma que hasta a mí me resultó indiferente. Pero ahora es completamente distinto… Hasta la forma en cómo me siento al hablar es distinta. ¿Cómo es posible? Y con él… que apenas lo estoy conociendo.
Me refregué los ojos con violencia al percibir las lágrimas queriendo salir. No quise hablar más.
- … Idiota.
Me exalté al escucharlo.
- ¿Q-Qué dijiste?
- Si no hubieras tratado de consolarme no te habrías puesto así. No debiste hacerlo, no tenías para qué.
Tenía un poco de razón. Pero ¿cómo iba a saberlo?… ¿Cómo iba a saber que me sentiría así? Desvié mi rostro nuevamente un tanto frustrado.
- Mírame.
- ¿Para qué?
- Anda, sólo hazlo.
Accedí. Entonces me encontré con la misma mirada nostálgica y enternecida que me observaba hace un momento. Volví a sentirme retraído.
- ¿Qué quieres?
- Que sonrías.
Y más retraído…
- No tengo ganas ahora.
- Entonces tendré que obligarte.
Y más retraído que antes… No entiendo por qué me intimida tanto su mirar.
- Vas a tener que obligarme entonces – volví a desviar la mirada.
- Bien, tú lo pediste.
Tomó mi hombro izquierdo y me giro para poder tenerme de frente. Mis pulsaciones se aceleraron un poco debido a que me tomó por sorpresa. Colocó ambas manos en mis mejillas. Me miró un momento. La manera en la que me miraba pareció cambiar… Al igual que la mía…
¿Acaso pretendía… besarme? Eso supuse pues se estaba acercando un poco dudoso. Estaba esperando a que mi cerebro me ordenara detenerlo, pero el impulso no llegó nunca. Cerré los ojos y aguardé a que su boca rozara la mía de una vez por todas, pero entonces sentí como estiraba la comisura de mis labios hacia arriba con sus pulgares. Con que a eso se refería con obligarme a sonreír…
-¡Sonríe!
¡¿Cómo pude pensar que iba a besarme?! ¡Estúpido, estúpido, estúpido! Aunque bueno, eso era lo que estaba esperando que hiciera. Un momento, ¿QUÉ ACABO DE DECIR?
- ¿Naruto?
Esperar algo no es lo mismo que desear algo… ¿O sí? No, para nada. Por supuesto que no quería que él me besara, pfft. Quien dijo eso, yo no dije eso. Bueno, no técnicamente…
- ¡Naruto! – sentí como era sacudido.
- ¡¿Qué?!
- ¿Te sucede algo?
- ¿P-Por qué preguntas?
- Porque tienes una expresión de sorpresa que no te la quita nadie.
- Ahhh, era beso, digo, ¡ESO! ¡Sí, eso! No, no es nada. No me pasa nada, claro que nada me pasa, por qué debería pasarme algo. Hahaha… - Dios, que me trague la tierra.
Sasuke de pronto comenzó a reír.
- Bien, si tú lo dices… - continuó riendo burlonamente.
- ¡¿Te estás riendo de mí, desgraciado?! – Naruto, cálmate, estás siendo demasiado obvio.
- Pues sí, lo estoy.
De acuerdo, a la mierda la calma.
- ¡¿Con qué pretexto te ríes de mí, maldito teme?!
- ¡¿Cómo me llamaste, maldito dobe?!
- ¡Teeeeeeme! ¡Teme, teme, teme, teme, teme!
- Más vale que te calles sí quieres salir ileso – pellizcó mis mejillas.
- Uhh, mira que miedo tengo’ttebayo – le hice lo mismo.
Entonces volvió a sonreír. Esta vez apaciblemente.
- Misión cumplida.
- ¿A qué… te refieres? – pregunté extrañado.
- Tenía que molestarte de alguna forma para lograr que te olvidaras de tu problema – soltó mis mejillas.
Me quedé mudo un momento.
- Lo repito… Eres extraño.
- Mira quién habla – estiró el brazo derecho y revolvió mi cabello con su mano. Luego volvió a apoyarse en la baranda.
Sí, Sasuke es extraño. Pero no me refiero a “extraño” en el sentido de que es anormal. Si no que es diferente a todas las demás personas con las que me he topado hasta ahora.
- … De todas maneras, no me arrepiento de haber tratado de ayudarte.
- ¿Por? – me observó.
- Porque lo que me sucedió no es culpa tuya.
De nuevo, lo siento, lo siento, lo siento xDDDDDDDDD es que no he tenido mucho tiempo para escribir, sin mencionar que siempre que escribo me distraigo MUCHO TwT Pero well, traté de que el capítulo quedara lo mejor posible, quedó horrible de eso no tengo duda x'DDDD trataré de que el próximo quede mejor. Y es posible que el próximo sea narrado por Sasuke, who knows 1313 bueno ya, me dejo de hablar xD
Bye, bye~
Bye, bye~
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Celty Mar Sep 20, 2011 3:15 pm
Me encanto el capitulo conito!
Aunque ya lo sabes, lo repito. Me encanta como escribís!! cuando sea grande quiero ser como vos a para, vos sos mas chica
Bueno con lo que iba, espero el próximo capitulo me esta gustando cada vez mas la historia.
Aunque ya lo sabes, lo repito. Me encanta como escribís!! cuando sea grande quiero ser como vos a para, vos sos mas chica
Bueno con lo que iba, espero el próximo capitulo me esta gustando cada vez mas la historia.
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Dom Oct 16, 2011 4:46 pm
Holo! Traigo capítulo >:3 Como dije anteriormente, este capítulo está narrado desde el punto de vista de Sasuke en relación al capítulo anterior, así que recomiendo releer el cap anterior antes de este xDDD
- Capítulo 4: Naruto:
- “Y-Yo ¡Lo siento!… S-Se te cayó esto…”
Jamás pensé que nuestro encuentro sería de esa forma. Pero es algo tan típico de él, nunca dejaba de sorprenderme. Ese dobe… siempre ha sido tan torpe, y parece que eso no ha cambiado. Al igual que su apariencia física, sigue teniendo el mismo rostro que tenía a los doce, tal como lo recuerdo.
Han pasado casi diez años desde la última vez que lo vi. Sin embargo, su imagen siempre permaneció nítida en mi memoria. Cómo podría olvidarlo, cómo olvidar a una persona con la que pasé por tanto, que inevitablemente dañé… y que también amé más que a cualquiera. Y aún lo amo, por eso estoy aquí ahora. Pero no lo veía hace tanto que no tenía idea de cómo iba a reaccionar cuando lo volviera a ver. Aunque resulta curioso que no pude reconocerlo cuando lo tuve al frente en un principio, o quizás no lograba convencerme de que era a él a quien tenía sobre mí, a tan escasos centímetros nuevamente.
¿Qué se suponía que hiciera? ¿Abalanzarme sobre él y decirlo lo mucho que lo he extrañado? ¿Bombardearlo de preguntas para saber si recordaba lo que pasó, sí se acordaba de mí? No, sólo lo hubiera espantado. Pero ¿qué fue lo que se me ocurrió?, salir corriendo, como un cobarde. Tsk, que idiota. Creo que ni siquiera se me ocurrió, fue más bien un acto reflejo. Estaba demasiado sorprendido como para enfrentarlo en ese momento supongo, no pude y ya. Me pregunto qué hubieras hecho tú en mi lugar, Naruto…
Justo después de eso me sentí tan…cínico. ¿Con qué cara me vengo a presentar ante él después de todo lo que le hice? Quizás no lo recuerda, pero ¿qué pasa si no es así? Nunca pude dejar de sentirme culpable, y como no si al fin y al cabo es mi culpa lo que le ocurrió. Tengo miedo… miedo de que lo recuerde y… no quiera volver a verme nunca más. No podría soportarlo.
No quiero deprimirme ahora, no puedo. Detesto que me vean así, tan miserable. Lo que me dijiste esa vez, ahora sólo logra deprimirme más…“– Oye, Sasuke.
- ¿Qué es lo que quieres, Usuratonkachi?
- ¿Estás triste?
- Por supuesto que no.
- ¿Por qué lo escondes? Baaaaaka, te conozco mejor que nadie, a mí no me puedes engañar’ttebayo.
- Tsk, deja de molestarme, idiota.
- ¿Por qué siempre tienes que ser tan agresivo, teme? Deberías dejar que las demás personas te ayuden.
- ¿Acaso tú quieres ayudarme?
- Claro que sí. Eres mi mejor amigo’ttebayo…
- ¿Y cómo piensas hacerlo?
- Emm… pues, no lo sé. Hahaha…
- Dobe.
- ¡Ah, ya se me ocurrió! Cuando era pequeño mi mamá solía cantarme una canción, eso siempre me animaba…”
Y hasta el día de hoy recuerdo esa canción cuando me siento de esta forma…“- Y… ¿bien?
- ¿Y bien qué’ttebayo?
- ¿Cómo era esa canción?
- ¡¿Acaso quieres que te la cante?!
- Pensé que esa era la idea, dobe.
- E-Es que… me da vergüenza, Sasuke… Pero bueno, era…”
- “Koibito no shiroi tenohira ni hitotsubu… Ochita sapphire. Nagusame ni fureta yoru ni umaretekita… Muku na shizuku ga… Hikari ni naru…”
Mi corazón latió como loco, ese día, me di cuenta de lo que comenzaba a sentir por él. Con su cantar, con su mirar, con su mano tímida sobre la mía…
- “Kanashimi sae anata no te de aoi houseki ni kawaruno, amai toiki furui nageki, subete nomihoshite kuretara… Soba ni… iru wa…”
Lo extraño, como lo extraño… Es demasiado…
Detesto tanto llorar, me siento débil. Pero a estas alturas ya es algo inevitable en mí. Naruto destruyó mi frialdad el día en que lo conocí. Naruto es mi debilidad, desde ese momento.
Lo único que quiero es verlo, sentirlo cerca, tenerlo a mi lado. Sólo espero que no me encuentre en este estado.
- Oye, ¿estás… bien?
De inmediato me estremecí. Esa voz era… No, no, no, no, no, no, no, ¡¿por qué ahora, dobe?! ¿Cómo puede ser tan inoportuno? Llevé mi puño a mi rostro para quitar el llanto. Aclaré mi voz, pensé en responder algo típico como “Claro que estoy bien, ¿qué te hace pensar lo contrario?”. O quizás responder con un simple y frío “¿Qué te importa?”. Pero mis anteriores miedos me acecharon nuevamente, impidiéndome hablar.
Entonces se acercó más y trató de mirarme. Tampoco pude…
- ¿Me escuchaste?
Insistía e insistía, una y otra vez hacía lo que fuera para ver mi rostro. Pero yo no hacía nada más que esquivarlo. Ahora mismo siento que no puedo verlo, supongo que… me da miedo… demasiado miedo. Temo enfrentarlo…
- ¡Deja de moverte y mírame’ttebayo!
Bufé. ¿Desde cuándo te volviste tan cobarde, Sasuke? Ya, tranquilízate de una vez. Respira hondo… voltea… Y actúa natural…
- ¿Qué? - ¡rayos!, soné muy frío…
Me observó como meditabundo. Luego alzó sus manos, las dirigió a mi rostro… y quitó el flequillo que cubría mis ojos. Lo acomodó detrás de mis orejas, me miró tiernamente. Dios, esa maldita sonrisa suya… Sigue intacta, tan hermosa, tan deslumbrante… tal como recuerdo. Mi respiración se volvió errática por un segundo. Espero que no se haya percatado de ese detalle.
- Así está mejor, ¿no lo crees? Ahora, repito la pregunta. ¿Estás bien?
¿Qué hago?, ¿qué digo? No lo sé… ¡Ya cálmate! Actúa natural, sólo sé tú mismo… Haz como si no lo conocieras, ¿qué le dirías si no lo conocieras?
- ¿Por qué te importa? No me conoces.
Pareció sorprenderse un poco por la pregunta.
- Pues, porque… no lo sé. Sólo… sentí la necesidad de ayudarte, supongo… ¿Te estoy incomodando?
- Un poco…
- Lo siento, no fue mi intención. Pero tienes razón. No soy quien para andarte cuestionando.
Ay, este Usuratonkachi. Siempre pensando lo peor…
- Yo no he dicho eso.
- Pero tú… me preguntaste…
- Fue una pregunta, nada más.
Reflexionó en silencio nuevamente.
- … Eres extraño, ¿sabes?
Sonreí.
- Y tú bastante impulsivo.
- Sí, lo sé. Me lo han dicho muchas veces.
Infló las mejillas. Idiota, es tan… adorable. Es increíble como aún permanecen en él sus antiguas actitudes. Hace lo mismo que hacía cuando lo molestaba o lo insultaba, no en serio claro. No pude evitar reír. Siempre que hacía eso lograba sacarme una sonrisa.
- ¡Te hice reír’ttebayo! – golpeó suavemente mi hombro. Chisté con la lengua. Esto me recuerda tanto al pasado…
Abrí los ojos, necesitaba mirarlo. Necesitaba mirar ese rostro que me vuelve loco. El me observó también.
Lo amo… lo amo, lo amo, lo amo, lo amo, lo amo. Ahora estoy seguro de que nunca dejó de ser así. Siempre lo amé.
Súbitamente agachó el rostro. Tal vez lo incomodé… Pero es que no puedo evitar ser obvio con lo que siento, simplemente no puedo mirarlo de otra forma.
Desvié mi mirada. Después de unos segundos, algo me tomó por sorpresa. Naruto me había tomado del brazo y, casi literalmente, estaba arrastrándome hacía un lugar que desconocía.
- Oye, ¿a dónde me llevas?
- Tú cállate y sígueme – respondió en apuros.
Recorrimos varios pasillos del edificio, hasta que finalmente cambió nuestro rumbo al cruzar la puerta que nos conducía a las escaleras. Comenzamos a subir.
- ¿Me dirás ahora a dónde vamos?
- Ya lo verás’ttebayo – volvió a sonreírme para luego continuar con la acción.
Sabía a dónde íbamos. El por qué lo desconocía.
Luego de ascender doce pisos, arribamos hacia su objetivo.
- La azotea – afirmé.
- Sí, aquí vengo cuando quiero olvidarme de todo. Y cuando me da flojera entrar a clases’ttebayo – sonrió como avergonzado – Soy Uzumaki Naruto, ¿y tú eres…?
Tragué saliva antes de contestar.
- Uchiha Sasuke.
Su repentina expresión de estupor me alarmó.
- Uchiha Sasuke… ¡¿Tú eres Uchiha Sasuke?!
¿Cómo era que sabía mi nombre? ¿Acaso… me recordaba? No, no podía ser. Me habría reconocido cuando nos encontramos el día anterior. El día anterior… mis libros… Ahora lo entiendo.
- ¿Caíste sobre mí y ni siquiera me recuerdas?
- Es que… te vi pasajeramente. Lo siento por eso, tenía muchas cosas en la cabeza, estaba pasando un pésimo día. No me había fijado en la advertencia de piso mojado, mucho menos en que tú venías por ahí. Lo siento, lo siento – se disculpó desesperado.
- No es necesario que te excuses tanto. Sólo fue un accidente.
- Bueno, sí… S-Supongo… - agachó un poco el rostro – Oye, ¿puedo… preguntarte algo?
- ¿Qué?
- Sobre lo que pasó ayer. Después de que chocamos… ¿por qué saliste corriendo así? Ni siquiera tomaste tus libros. O ¿es que acaso algo anda mal conmigo?
Dobe, ¿acaso piensa que huí de él? Bueno, en realidad eso es cierto, no lo voy a negar. Pero no puedo decirle eso.
- Por supuesto que no.
- ¿Entonces?
- También estaba pasando un mal día, eso es todo – mi excusa.
- Oh… Y ¿aún lo estás pasando?
- Sí, eso creo… - me apoyé en el barandal.
- ¿Te molesta si te pregunto por qué?
Sigue siendo tan curioso como antes…
- No, pero preferiría no hablar de eso…
- La mayoría de las veces hablar de tus problemas ayuda a apaciguar como te sientes.
- Con que sí, ¿eh?
- Eso es lo que se le llama “quitarse un peso de encima”. Créeme, lo sé mejor que nadie’ttebayo. Estoy seguro de que tengo muchos más problemas que tú. Y cuando algo me aqueja siempre suelo expresárselo a alguno de mis amigos. Ellos me ayudan a encontrar una posible solución, pero, lo que es más importante, me escuchan, y eso me tranquiliza.
Y tan insistente como antes…
- ¿Tan empeñado estás en ayudarme?
- No me gusta ver a la gente triste, por eso siempre trato de hacer algo para animarla. Aunque es bastante contradictorio, pues estoy triste o decaído la mayor parte del tiempo y se me hace imposible animarme autónomamente – sonrió con pena.
¿Qué debería decirle ahora? Bueno, para qué inventar algo. Podría decirle lo que he estado sintiendo todo este tiempo. Miré hacia el horizonte, suspiré antes de hablar.
- No es en realidad un problema, si no simple melancolía.
- ¿Cosas del pasado?, ¿recuerdos?
- Sí
- Que coincidencia’ttebayo – dijo casi en un susurro.
- ¿Por qué coincidencia?
- Porque a mí me pasa exactamente lo mismo que a ti, sólo que es más complicado, mucho más complicado…
- ¿A qué te refieres?
- Me refiero a que supongo que tú no te caíste de una escalerilla, te golpeaste la cabeza y perdiste la memoria a los doce años como yo.
Sentí que mi corazón dio un vuelco al oírle decir eso. Me hice el incrédulo.
- ¿En serio eso te ocurrió?
Naruto asintió con la cabeza gacha.
- No he sido el mismo desde entonces. Aunque bueno, tampoco recuerdo muy bien como era antes.
- Y ¿no recuerdas absolutamente nada?
- Sí, recuerdo algunas cosas. Pero la mayoría de ellas las recordé gracias a mi familia y mis amigos, ellos solían hablarme sobre ciertos sucesos para poder orientarme – se silenció un momento – Sin embargo… aún siento que hay algo que me falta recordar, algo importante’ttebayo. Pero simplemente no puedo hacerlo, por más que trate de pensar, no puedo… Sigue oculto en algún rincón de mi cerebro, yo lo sé. Eso es lo que me estresa tanto, que está allí y no puedo descubrirlo.
Me asaltó la duda.
- ¿Qué te hace pensar que puede ser importante?
- Sueños que he tenido este último tiempo, siempre son los mismos. Son tan extraños y tan desesperantes. En cada uno de ellos me veo desolado en medio de un bosque. De pronto, comienzo a correr en búsqueda de algo o alguien incógnito que en ese momento ni siquiera yo mismo lo sé… Hasta que lo encuentro y algo en lo más profundo de mi ser me convence de que aquello es lo que busco. Entonces mi corazón se dispara y me siento de una forma tan… extraña, pero también tan intensa que duele. Cada vez que veo esa imagen frente a mis ojos es así, por eso sé que pudo haber sido algo importante que me ocurrió en el pasado. Porque lo que experimento es tan real, tan palpable… Es como un constante deja vu. Si sueño eso por algo debe ser, ¿no? Siempre que trato de descifrarlo no logro conseguirlo, por eso siento tanta impotencia…
¿Bosque? Acaso podría ser que… ¿en su sueño está bajando hacia el muelle? ¿El lugar en el que lo conocí, donde nos encontrábamos siempre? ¿Acaso lo que busca en sus sueños… soy yo? Si eso es verdad, entonces quiere decir que… de cierta forma ¿me recuerda?
Al ver como Naruto se puso después de confesarme aquello, salí de mi fuero interno. Entonces comencé a sentir la culpabilidad sobre mí.
- … Idiota.
- ¿Q-Qué dijiste?
- Si no hubieras tratado de consolarme no te habrías puesto así. No debiste hacerlo, no tenías para qué.
Diablos, hablé sin pensar. Naruto desvió el rostro un tanto molesto, creo que lo desanimé más de lo que estaba. Soy un idiota. Debo hacer algo para alentarlo.
- Mírame.
- ¿Para qué?
- Anda, sólo hazlo.
Volvió a mirarme, un poco desconfiado.
- ¿Qué quieres?
- Que sonrías.
- No tengo ganas ahora.
- Entonces tendré que obligarte.
- Vas a tener que obligarme entonces – volvió a desviar la mirada.
- Bien, tú lo pediste.
Se me ocurrió hacer lo mismo que él me hizo una vez. Lo giré para tenerlo de frente otra vez y puse mis manos sobre sus mejillas. Miré sus ojos… y entonces olvidé lo que pretendía hacer. Fue una sensación magnética, casi como si sus labios atrajeran a los míos. No pude evitar comenzar a acercarme, igualmente dudoso. De pronto no me importó más, en ese momento sólo quería besarlo y acabar con mi tortura. Preferí esperar a que él me detuviera. Sin embargo, ni siquiera intentó hacer algo para rehuir mi acción. Inclusive cerró los ojos, como esperando a que lo besara. Al verlo caí en cuenta de que había perdido el autocontrol. Con dificultad omití mi acto e hice lo que originalmente planeaba hacer. Con mis pulgares estiré la comisura de sus labios hacia arriba, simulando una sonrisa.
- ¡Sonríe!
Naruto abrió los ojos de golpe y un rubor casi imperceptible cubrió sus mejillas. Me extrañó que no protestara.
- ¿Naruto?
Seguía con la misma expresión, como cavilando lo que había pasado. Dejé de hacer lo que hacía y lo sacudí para hacerlo reaccionar.
- ¡Naruto!
- ¡¿Qué?! – casi gritó.
- ¿Te sucede algo?
- ¿P-Por qué preguntas?
- Porque tienes una expresión de sorpresa que no te la quita nadie.
- Ahhh, era beso, digo, ¡ESO! ¡Sí, eso! No, no es nada. No me pasa nada, claro que nada me pasa, por qué debería pasarme algo. Hahaha…
Se ruborizó aún más. Naruto aún no ha aprendido a disimular su obviedad. Me causó gracia, no pude evitar reír.
- Bien, si tú lo dices… - dije entre risas.
- ¡¿Te estás riendo de mí, desgraciado?!
- Pues sí, lo estoy – es imposible no molestarlo.
- ¡¿Con qué pretexto te ríes de mí, maldito teme?!
Mi risa se desvaneció.
- ¡¿Cómo me llamaste, maldito dobe?!
- ¡Teeeeeeme! ¡Teme, teme, teme, teme, teme!
- Más vale que te calles sí quieres salir ileso – pellizqué sus mejillas.
- Uhh, mira que miedo tengo’ttebayo – imitó mi acción.
La situación volvió a causarme gracia. Así solíamos tratarnos cuando éramos pequeños. Que irónico es que todo se esté repitiendo. Volví a sonreír.
- Misión cumplida.
- ¿A qué… te refieres?
- Tenía que molestarte de alguna forma para lograr que te olvidaras de tu problema – solté sus mejillas.
Nuevamente parecía reflexionar.
- Lo repito… Eres extraño.
- Mira quién habla – revolví su cabello sin esconder mi afecto. Luego volví a apoyarme en el barandal. Nos quedamos en silencio un momento.
- … De todas maneras, no me arrepiento de haber tratado de ayudarte.
- ¿Por?
- Porque lo que me sucedió no es culpa tuya.
La culpabilidad me inundó de nuevo.
Naruto, no tienes idea…
Y eso~ Trataré de no demorarme tanto para el próximo, aunque siempre digo lo mismo x'DDDD
ConniesomnieTemporal - Get your crayon, crayon~
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Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Noa Lun Oct 17, 2011 1:53 am
t esta kedando genial espero k pongas pronto la contii :D
NoaNuev@ - En casa
31 46 0 26/11/2010 Itasasu Itanaru Sasunaru Gaanaru Tsunagoku Kakanaru Minanaru Naruto,Naruto shippuden, Vampire Knigth, Kaichou wa maid sama, Kuroshitsuji, Junjou Romantica, KHR, Sekai ichi Hatsukoi, Nº6, Uta no princess Fairy Tail etc... Naruto è.é 5 円 Leer Sasunaru
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por suisuimato Lun Oct 17, 2011 6:03 am
Moriréeeeee D:
Me encanta tu fic! ;w; me lo he leído todo de una xD
asdasñdasda Sasukeee, qué le hiciste a Naruto? ;^; y
por qué no lo besaste, maldición? ¬3¬
x'DD ok, yah
Insisto, me encantó tu fic, espero continuación pronto~ C:
![El muelle de la regresión [Longfic] 864190](/users/2614/38/02/60/smiles/864190.gif)
Me encanta tu fic! ;w; me lo he leído todo de una xD
asdasñdasda Sasukeee, qué le hiciste a Naruto? ;^; y
por qué no lo besaste, maldición? ¬3¬
x'DD ok, yah
Insisto, me encantó tu fic
, espero continuación pronto~ C: 
suisuimatoRutinario - literalmente tienes la mitad mi corazón v
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21/02/2011 9.805 円
![El muelle de la regresión [Longfic] H9e9X](https://i.imgur.com/h9e9X.gif)
![El muelle de la regresión [Longfic] XhF1l](https://i.imgur.com/XhF1l.gif)
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Flo_Kuran Mar Nov 08, 2011 1:57 am
Kyaaaaaaaaa, ya quiero la continuacion!! No nos tortures asi ![El muelle de la regresión [Longfic] 832293](/users/2614/38/02/60/smiles/832293.gif)
Flo_KuranNuev@ - 40 47 0 21/06/2011 NaruSasu; SasuNaru
1.515 円
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Conniesomnie Vie Oct 26, 2012 5:01 pm
De seguro nadie recuerda este fic e____e aún así vengo a actualizar.
- Capítulo 5: Complicidad:
- - ¿Y bien?
- ¿Huh? ¿Y bien qué’ttebayo? – reaccioné al fin.
- Vas a contarme lo que pasó, ¿o no? – Sonrió apacible.
Había ido a reunirme con Sai al final del día, después de mi encuentro con aquel chico en la facultad. Fue un día bastante raro, no tenía palabras para describirlo… Todo lo que sucedió, fue tan poco, pero muy significativo. Nuestro tiempo juntos no duró mucho. Al minuto de haber finalizado nuestra conversación en la azotea del edificio me dijo que debía marcharse. Luego de la despedida, no me moví. Me quedé allí, pensando, por un buen rato. Y hasta ahora seguía de esa manera. Pensativo… Nada más.
- Pues… no pasó mucho.
- ¿Seguro?
- Sí…
- Hmm… No te creo – Seguía sonriendo. Esa maldita sonrisa, a veces siento que se burla de mí deliberadamente.
- Tsk, ¿qué te hace pensar eso?
- Por cómo te comportas, Naruto-kun. Es obvio.
- Sólo charlamos… - me apresuré en contestar.
- ¿Por qué estás así entonces?
- Así ¿cómo?
- Tan callado, cortante y abstraído.
- No es nada’ttebayo…
- Puedes decirme – De pronto posicionó su mano sobre mi hombro, aún con aquella sonrisa eternamente instalada en su rostro. Lo miré con asombro. Trataba de inspirar confianza en mí como fuera. No dije nada.“- … Supongo que tú no te caíste de una escalerilla, te golpeaste la cabeza y perdiste la memoria a los doce años como yo… No he sido el mismo desde entonces. Aunque bueno, tampoco recuerdo muy bien como era antes.
- Y ¿no recuerdas absolutamente nada?
- Sí, recuerdo algunas cosas. Pero la mayoría de ellas las recordé gracias a mi familia y mis amigos, ellos solían hablarme sobre ciertos sucesos para poder orientarme… Sin embargo… aún siento que hay algo que me falta recordar, algo importante’ttebayo. Pero simplemente no puedo hacerlo, por más que trate de pensar, no puedo… Sigue oculto en algún rincón de mi cerebro, yo lo sé. Eso es lo que me estresa tanto, que está allí y no puedo descubrirlo.
- ¿Qué te hace pensar que puede ser importante?
- Sueños que he tenido este último tiempo, siempre son los mismos. Son tan extraños y tan desesperantes. En cada uno de ellos me veo desolado en medio de un bosque. De pronto, comienzo a correr en búsqueda de algo o alguien incógnito que en ese momento ni siquiera yo mismo lo sé… Hasta que lo encuentro y algo en lo más profundo de mi ser me convence de que aquello es lo que busco. Entonces mi corazón se dispara y me siento de una forma tan… extraña, pero también tan intensa que duele. Cada vez que veo esa imagen frente a mis ojos es así, por eso sé que pudo haber sido algo importante que me ocurrió en el pasado. Porque lo que experimento es tan real, tan palpable… Es como un constante deja vu. Si sueño eso por algo debe ser, ¿no? Siempre que trato de descifrarlo no logro conseguirlo, por eso siento tanta impotencia…”
Recordaba aquel momento, es lo que ha estado dando vueltas y vueltas en mi cabeza desde que se fue. Además lo de la canción, la que escuché en mi sueño… La misma que cantaba él cuando lo encontré en el pasillo. Su voz, la misma que oí en aquella extraña ilusión. La cercanía tan inmediata, todo… Todo era tan confuso e insólito. Sai no lo sabe, no sabe nada de eso, nada de mi pasado. Desde que lo conocí nunca deposité mi confianza en él, no me parecía una persona seria en lo absoluto, y lo que me había sucedido no era un juego para mí. Sentía que si se lo contase alguna vez lo tomaría a la ligera, que diría cosas innecesarias e impropias, y eso sí que me haría enfurecer. Siempre se mostró así, por eso… ¿Por qué fiarme de él ahora? No, simplemente no podía contarle. Pero…
- ¿Sai?
- Dime, Naruto-kun.
- ¿Puedo preguntarte algo?
- Claro que sí.
- ¿Por qué te interesa tanto todo esto?
Increíblemente su expresión cambió. Me miró con sorpresa al escuchar mi interrogante. Guardó silencio un pequeño instante, luego su semblante volvió a tornarse pacífica y se dispuso a contestar.
- ¿Sabes? Siempre te he considerado mi amigo, no sé si tú. Aunque, a pesar de conocernos hace bastante tiempo, nunca nos hemos acercado mucho. Me gustaría conocerte más y quisiera que confiaras en mí plenamente, así como yo sé que puedo confiar en ti. Eres una gran persona, Naruto. Y siento que ahora tengo una oportunidad para lograr eso. Quiero que sepas que estoy para ti si necesitas a alguien con quien hablar o desahogarte.
Me dejó sin palabras, atónito. Quizás fui prejuicioso. Tal vez Sai no es tan malo como me lo imaginaba. Él sólo quiere ayudarme…
- Yo también te considero mi amigo’ttebayo. Disculpa por ser tan distante contigo. La verdad… nunca me pareciste de confianza, por tu personalidad. Por eso… yo…
- Te entiendo perfectamente. Discúlpame a mí por haberte dado una impresión equivocada por mis actitudes.
- No te preocupes, no tienes por qué disculparte. Oye… Gracias. Tú también puedes contar conmigo para lo que sea.
- Me alegra oír eso.
Tenía razón. Quizás este era el momento para que podamos acercarnos más y tener una mejor relación. Sí, se lo contaría. Todo.
No sabía por dónde ni cómo comenzar…
- Sí… pasó algo, que me dejó consternado – agaché el rostro levemente.
- ¿Qué cosa?
- Pues, verás… No es tan simple. No es fácil de explicar.
- ¿Por qué? ¿Qué ocurrió?
Me quedé callado un momento, luego tomé el valor para proseguir. Lo volví a ver de frente.
- Sai, hay muchas cosas que tú no sabes de mí. Nunca había querido decírtelo, ya te expliqué el por qué. Pero creo que es tiempo de que lo sepas, me demostraste que puedo confiar en ti. Voy a contarte mi verdad. – Él sólo me observaba serio, por primera vez. Luego me dispuse a continuar - … Hace ocho años, cuando era un niño, tuve un accidente. Caí, me golpeé fuertemente la cabeza y perdí la memoria. Estuve inconsciente por varios días. Cuando desperté, en el hospital, no recordaba nada, absolutamente nada. No reconocía ni a mis padres, ni a mis amigos, ni mucho menos sabía quién era yo. De a poco iba recobrando memorias, aunque vagas. Mis familiares también me ayudaban a recordar cosas. La verdad, no sé si haya recuperado todas mis vivencias, por eso siempre me he sentido incompleto. Además, hace un tiempo, algo me ha pasado… Cada vez que duermo, extraños sueños vienen a mí, que siento como si fueran evocaciones. Se sienten tan reales… Las sensaciones que emergen en mí son tan intensas… Algo me dice que he vivido eso anteriormente. Y siempre ha sido lo mismo. En aquellas ilusiones siempre me veo a mí corriendo hacia un muelle, en el cual me encuentro con una persona. Un chico, aunque desconozco quién es y el por qué voy a verlo. Sin embargo, el escenario nunca cambia. A veces es de día, a veces es de noche. A veces estoy más lejos, a veces relativamente cerca. Pero el lugar al que me dirijo siempre ha sido el mismo, y por la misma razón: Verlo a él. – Hice una pequeña pausa - Recientemente… algo ha cambiado en mis sueños. Cuando me encamino al muelle, escucho a aquel chico entonar una canción, que, en el momento en el que lo escucho, llena mi corazón inmensamente, provocando que el verle me desespere aún más. Y…
De la nada me trabé, no podía continuar. Sentía mi corazón apretarse con fuerza, y una infinidad de emociones inundarme, apoderándose de mí por entero.
- ¿Y…? ¿Y qué, Naruto? Oye, ¿te encuentras bien? – Sai trataba de hacerme reaccionar al quedarme callado repentinamente.
- Y… Yo… Yo le escuché… - murmuré para mí mismo.
- ¿Qué dijiste?
- Yo… lo escuché’ttebayo…
- ¿A quién? ¿Qué escuchaste?
- … Cuando entré al edificio, escuché a alguien cantar aquella canción con la que soñé. Doblé en el pasillo, y lo vi… Era él, era Sasuke…
Lo miré a los ojos. Parecía sorprendido por todo lo que le estaba relatando.
- ¿Y eso qué te hace pensar? – preguntó al cabo de un rato.
- No lo sé… No quiero imaginar nada. Pero… es que su voz, es igual. La misma que escuché.
- Tú, sinceramente, ¿crees que es Sasuke quien aparece en tus sueños?
- No sé… Y si fuera así, no tiene sentido. ¿Por qué sería él? Hace tan sólo un par de días lo he conocido. Es absurdo…
- Piénsalo bien – me interrumpió. La seriedad de sus palabras me alarmó.
- ¿A… qué te refieres?
- … No… A nada – cerró los ojos y volvió a sonreír despreocupado – Creo que lo mejor es que no le des tanta importancia al tema, no te hace bien. Quizás sólo sea mera coincidencia. Todos tenemos esos llamados “deja vu”. Sentimos como si hubiésemos vivido con anterioridad algo que nos ocurre. Tal vez sea eso… No sigas pensando en ello.
- Sí… Tienes razón, supongo…
Volví a agachar el rostro. ¿Dejar de pensar en ello? Aquella frase era tan sugestiva… Pero por más que quiera no cuestionarme todo lo que me sucede, es imposible. No se puede, nadie podría. Mi mente necesita un maldito descanso.
- Aprecio que me hayas contado todo esto. – Habló de repente – Ahora que sé lo esencial de ti, comprendo muchas más cosas.
- Sí… - Sonreí con melancolía. Seguidamente me levanté del sofá y estiré los brazos – Oye, ninguna palabra a Sakura-chan de esto, recuerda – Tomé mi mochila y me la puse al hombro.
- Claro. Emm… ¿Naruto?
- ¿Hm?
- ¿Puedo… preguntarte algo más?
- ¿Qué’ttebayo?
- ¿Por qué quieres mantener a Sakura al margen de lo que te pasa?
Suspiré.
- No es que quiera mantenerla al margen de lo que me pasa… Sakura-chan… Ella me ha acompañado siempre. Desde antes de mi accidente y durante aquel tiempo. Ha sido uno de los pilares fundamentales para mí, ha sufrido por todo lo que me ha sucedido. Desde entonces me ha protegido bastante, y se lo agradezco con la vida. Pero… no quiero que se preocupe más de la cuenta. Ya ha hecho mucho por mí. Lo ha pasado lo suficientemente mal por mi culpa. No quiero causarle más daño… Y sea lo que sea que esté pasando en mi cabeza, si es que estoy recordando algo o no con aquellos sueños, es un tema que quiero enfrentar solo. Porque siento que es realmente importante, y debe ser así. De hecho, si no hubiera sido por tus comentarios indebidos, no le habría mencionado nada al respecto, pero no paró de cuestionarme y lo tuve que escupir. Pero en fin… En cuanto a Sasuke… Tampoco quisiera que supiera de él, en vista de la situación. Nada más que eso.
- Comprendo… Pero no puedes escondérselo por siempre.
- Lo sé, estoy consciente de ello. Pero por el momento, prefiero que sea así.
- Está bien.
- Entonces, será nuestro secreto. ¿Me das tu palabra? – sonreí.
- Tienes mi palabra, Naruto-kun – realizó la misma acción que yo.
- Bueno… Me voy – me dirigí hacia la puerta – Sai… Gracias por todo – dije antes de cerrarla tras de mí.•••
Yacía de espalda sobre mi cama, mirando el techo, con ambas manos detrás de mi cabeza. Sintetizaba cada acontecimiento que había ocurrido el día de hoy al encontrarme con Sasuke… Recordaba aquella armoniosa voz inundar los pasillos e inevitablemente arribar a mis oídos, escuchándole cantar dicha canción. Seguido de nuestra conversación en la azotea, y luego…“- Mírame.
- ¿Para qué?
- Anda, sólo hazlo.
- ¿Qué quieres?
- Que sonrías.
- No tengo ganas ahora.
- Entonces tendré que obligarte.
- Vas a tener que obligarme entonces.
- Bien, tú lo pediste”
Sentí mis mejillas arder por la vergüenza al evocar inconscientemente justo aquel momento. Su mirar… Esos malditos ojos que me hicieron sentir completamente retraído. Esa maldita acción que realizó, haciéndome pensar algo indebido. Sacudí impetuoso mi cabeza para borrar aquella escena de mi mente.“- Tú, sinceramente, ¿crees que es Sasuke quien aparece en tus sueños?
- No sé… Y si fuera así, no tiene sentido. ¿Por qué sería él? Hace tan sólo un par de días lo he conocido. Es absurdo…
- Piénsalo bien”
Era ahora la voz de Sai retumbando en mi cerebro. Sobretodo aquella última frase…“Piénsalo bien”
- ¿Sasuke ser quién aparece en mis sueños? Imposible…
No. No había nada que pensar.
ConniesomnieTemporal - Get your crayon, crayon~
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24 15/08/2010 ShikaTema | ItaSasu | MinaKushi | JoonxMir | JongKey | GD&TOP Naruto | Gravitation | Jigoku Shōjo | Death Note | Sekaiichi Hatsukoi Naruto SD Rock Lee no seishun full-power ninden 900 円 Trade! 2 -
Re: El muelle de la regresión [Longfic]
por Flo_Kuran Sáb Oct 27, 2012 2:21 am
Recuerdo, recuerdo. He esperado por este fic forever.
Kyaaaa, nuevo capitulo!
Ya no te tardes tanto con el proximo. Lei tus notas en Amor-Yaoi y comprendo el por que de tu ausencia. Ahora eres toooda nuestra.
Nos leemos. Gracias por la actualizacion.
Kyaaaa, nuevo capitulo!
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Nos leemos. Gracias por la actualizacion.
Flo_KuranNuev@ - 40 47 0 21/06/2011 NaruSasu; SasuNaru
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